Reflexiones de la distancia entre Barça y Madrid

El nuevo tropiezo del Barça en El Madrigal, que ha situado la ventaja en siete puntos a favor del Real Madrid, ha abierto numerosos debates acerca de si la Liga está o no sentenciada. Personalmente, el fútbol me ha enseñado que nada es imposible, así que no diré que la Liga está acabada, pero si es verdad que tiene buena pinta para el equipo "merengue". Como creo que las casualidades no existen y que todo tiene un porqué, ahí van unas cuantas de mis reflexiones de lo que ocurre en la lucha por el campeonato.

Las variantes tácticas. Ante la plaga de bajas del equipo azulgrana, Guardiola optó por un planteamiento con tres centrales y Adriano y Dani Alves que actuaban como extremos. Ambos son futbolistas con recorrido, pero tienen más problemas para desenvolverse en espacios cortos; el Villarreal planteó un partido con las líneas muy adelantadas y juntas que obligaba a jugar en poco espacio y así las alas del Barça tenían muchos problemas para entrar en juego y para ser precisos. Los marcajes individuales a Xavi y a Messi y las ayudas acabaron por atascar al equipo de Guardiola. El Barça mejoró en el segundo tiempo cuando Dani Alves retrasó su posición y Tello entró en la banda, abriendo mucho mejor el campo y dando más soluciones para atacar la defensa del Villarreal.

Los delanteros son puntos. Durante toda la temporada, la responsabilidad del gol ha recaído casi únicamente en un jugador y la falta de alternativas acaba por costar puntos, especialmente en partidos cerrados. Sin Villa, sin Pedro - otra vez lesionado - y con Alexis tocado, el Barça pierde pegada, y un mal día de Messi compromete demasiado el resultado. El Madrid resuelve partidos similares al de ayer porque tiene muchas alternativas de cara a gol, sobre todo tres delanteros en un gran momento, y siempre hay alguna de ellas que acaba apareciendo.

Existen razones técnicas para creer en la remontada, pero tengo dudas en el aspecto mental. Por fútbol ya sabemos lo que es el Barça, y está capacitado para ganar muchos partidos en ésta segunda vuelta; sin embargo, veo al equipo falto de ese punto de motivación necesario para aguantar un ritmo tan exigente de jugar tantos partidos con tanta presión y ante un rival que obliga a no fallar nunca. Es algo natural que le ocurre a un deportista después de una época de éxito prolongado, y la presión a la que ha estado sometido el Barça en los tres últimos años ha sido tremenda. Justamente lo contrario ocurre en la casa blanca, dónde la obligación por ganar al mejor Barça de siempre es ya muy grande sobre los jugadores y el entrenador, y por eso la motivación es máxima.

El Barça sigue siendo fuerte en los partidos importantes. Como demostró en la Supercopa, en San Siro o en el Bernabéu, el Barça en los partidos importantes muestra su mejor cara. Ahí si encuentra la motivación que le falta para ganar en partidos de menos cartel, por eso sigue siendo un aspirante serio a la Champions. 

Sólo el Madrid puede perder ésta Liga. Siete puntos de ventaja en media Liga para un equipo que sólo ha dejado escapar ocho parecen bastantes. Además, el buen momento de Özil en los últimos partidos es una excelente noticia. El Madrid depende de sí mismo, pero ojo, tampoco en el juego estoy viendo un Madrid infalible últimamente. Encaja goles con más facilidad, y tiene más altibajos en el juego que dos o tres meses atrás. Ha resuelto algunos partidos más por pegada y empuje. Por lógica, debería pinchar en algún momento, pero dos partidos y pico son mucho margen de error.

Que nadie se olvide que en fútbol, una semana es mucho y dos, un mundo. En éste deporte no hay nada escrito y eso es lo que lo hace tan grande. Quién sabe si todas éstas reflexiones no valgan de nada dentro de siete días, y por eso - porque es tan impredecible - si eres del Madrid tendrás motivos para sonreír, y si eres del Barça, pues también.