Qué cosas que tiene Balotelli

Mario Balotelli, desequilibrante y

problemático.

Cuando fichas a Mario Balotelli para tu equipo, ya sabes lo que estás fichando. Más cuando se trata de Mancini, el entrenador que lo hizo debutar en el Inter, que lo conoce muy bien. Por un lado, tienes a un excelente futbolista, capaz de resolver un partido en cualquier momento; si está centrado, es para mí el jugador más desequilibrante del equipo de moda en Inglaterra, el Manchester City, junto a Agüero. Lo tiene todo: físico, manejo de las dos piernas, recursos dentro del área, inteligencia en sus movimientos...y tan sólo 21 años. En su contra: tienes al jugador más díscolo, indisciplinado y problemático que soy capaz de recordar. Y recuerdo unos cuantos.

Protagonista semana sí y semana también, es una fuente de historias inagotable. Contarlas todas llenaría incontables posts de blogs como éste. La última, a su expulsión en el partido ante el Liverpool el pasado fin de semana, hay que sumarle que fue confundido con un ladrón en el edificio dónde vive, porque se estaba llevando un equipo de música de su casa a casa de un amigo. Luego es capaz de marcar dos goles en la histórica victoria del City por 1-6 en Old Trafford ante el eterno rival, justo un día después de tener que salir huyendo de su domicilio por un incendio provocado por él mismo mientras lanzaba petardos con unos amigos. Lanzar dardos desde una ventana a los juveniles de su club que se encontraban debajo, estrellar su Audi R8, fotografiarse con miembros de la Camorra napolitana, pelearse con compañeros y rivales, o con los aficionados del equipo que le dio a conocer son sólo algunas de las historias que pueblan su currículum. 

Debutó en la Seria A con el Inter con apenas 17 años, tras saltarse siempre todos los pasos de su formación en la categoría que le tocaba jugar. En 2006 estuvo a prueba con el cadete del Barça, impresionando con 5 goles en su primer partido, pero se desestimó su fichaje por "problemas surgidos con la operación". Su carácter ya le ha causado numerosos problemas, pero Balotelli no parece tener intención de cambiar. Siempre parece enfadado con alguien, y con rabia por demostrar algo a los que le critican, pero es una pelea que sólo el comprende. Lo sostiene su indiscutible talento, pero es una pena que un jugador de éste nivel no esté más centrado, porque le resta continuidad a su juego y acaba por agotar la paciencia de cualquiera. Eso sí, Mancini no puede quejarse: cuando desembolsó 30 millones de Euros por hacerse con los servicios del italiano, ya sabía a quién estaba fichando. Así que ahora, para lo bueno y lo malo, tendrá que apechugar con las cosas que tiene Balotelli.

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