Tristeza, es la palabra que define perfectamente mi sentimiento como malaguista. No soy muy viejo pero os aseguro que he vivido lo mejor y lo peor de este club y este es el momento más triste de mi lado futbolístico.
Evidentemente, no es comparable a la situación de crisis y paro que nos atormenta. Hay que tener los pies en el suelo, esto es fútbol y nada más pero como todo en la vida las cosas más banales también te acercan a la realidad y a los aspectos más profundos y desconocidos del ser humano. Y no, no me preocupo por los futbolistas, técnicos o de algunos empleados del club (al que alguno conozco, aprecio e incluso siento cierta admiración por él) y que por su calidad volverán a trabajar a primer nivel, lo digo por esa afición harta de sentirse de segundo nivel que comenzaba a forjar esa identidad propia de clubes como Cádiz o Sevilla y a soñar con ver nacer a malaguistas que nunca mirarían a las capitales españolas para elegir sus colores futbolísticos.
Se irán los Cazorla, Toulalan o Isco, nos quedaremos en la ruina como hace un par de años y seguramente bajaremos de nuevo al infierno y, de tenerlo todo deportivamente, pasaremos de nuevo a la nada futbolística pero lo peor ya habrá llegado. Con su espantada, el jeque no sólo deja agonizando al club sino que mata y envenena la tierra donde empezaban a nacer los primeros brotes de malaguistas de pura cepa.
Volveremos a Segunda o Segunda b y la peor de las herencias no será ni las deudas, ni los embargos, ni una posible desaparición y refundación del club, sino volver a soñar con un amistoso frente a un primera, jugar un Trofeo Carranza o escuchar como en las gradas casi vacías de la Rosaleda se escucha gritar en los bares los goles de Barça, Madrid o Valencia.
No es reprochable la actitud de los jugadores y cabezas visibles del equipo. Son trabajadores y no tienen porqué tener este sentimiento. Es lógico que busquen su salida hacia nuevos lugares más seguros y creo que reabre un tema muy olvidado en el fútbol actual y que poco a poco comienza a resurgir: el amor a los colores.
Aunque logre tumbar nuestra moral, a los malaguistas de corazón nos quedará el alma y en esa dirección es en la que debemos empujar. Quizás sea el momento de volver a empezar de cero, educar a nuestros chavales de cantera, mostrarles qué es ser malaguista, enseñarles los peores momentos de nuestra historia e inculcarles el sentimiento de lucha y supervivencia que este club lleva en los genes. Hacerles ver que son el corazón de un equipo que les necesita y que confiará en ellos para ser lo que nunca ha logrado y merece por historia y sentimiento, ser un grande por derecho propio.
Sin jeque o con jeque, con Cazorlas o sin ellos, ahora soy más malaguista que antes y os aseguro que comienzo a perder interés por los grandes clubes que no tienen problemas de dinero ni liquidez porque, simplemente, no interesa sacarlos.
quien celebra en malaga los goles del Valencia? antes celebran los del Atletico, Bilbao o Betis.
ResponderEliminarEra un ejemplo... no te quedes con eso...
ResponderEliminarSoy malagueño pero no malaguista (con esta frase sabras perfectament quien soy) ya q x circunstancias d la vida he mamado desd pequeño los colores merengues. Soy uno de los q gritan los goles dl madrid en malaga y no m averguenza decirlo, pero eso no quita que vea q lo q sta haciendo la directiva actual sea reprochable y q esten jugando con los sentimientos d paisanos qtienen el corazon en un puño cn lo q le estan haciendo al equipo d sus amores. Espero q sta t riste historia termine algun dia cn gente decente y comprometida q se ponga a capitanear este buque ya q
ResponderEliminarLa gente d malaga se lo merece
ResponderEliminarSevilla o cadiz? Betis a tomar por culo? Anda ya!
ResponderEliminarrepito, son ejemplos. Tampoco metí al Lugo, ni al Oviedo, ni al Rayo y todos ellos entran dentro de este grupo al que me refiero. Repito, quédate con lo importante. Gracias!!
ResponderEliminarOs recomiendo este post http://t.co/6CeIFD8x
ResponderEliminarTristemente cierto alex .Suscribo lo que dices...un saludo desde Malaga!
ResponderEliminarJordi
Te entiendo perfectamente. Yo también soy un malaguista exiliado en Madrid, y buenos leñazos que nos meten aquí los colchoneros, aunque algo ridículos al ser sus deudas muchísimo mayores que las nuestras, aunque esas son otras historias...
ResponderEliminarEl año que ascendimos de Tercera, en 1995, fui a ver partidos como el de la fase de ascenso contra el Isla Cristina, o contra el Juventud de Torremolinos (mi pueblo) en El Pozuelo (ganamos 0-1 con gol de Basti). He visto al equipo en todas las categorías, he festejado los ascensos en La Rosaleda y he sufrido el descenso de hace unos años. Pasé de las emociones ante el Villarreal en la Intertoto o el Leeds United en la UEFA al alivio de golear al Poli Ejido para quedarnos en Segunda.
Vamos, que lo he visto todo y ahora que por una vez en la vida podíamos soñar nos cortan las alas. Bueno, pues podremos contarles a nuestros nietos que vimos al Málaga en la Champions, o al menos en la previa (espero y deseo que la superemos). Eso ya no nos lo quita nadie.
Un abrazo y FORZA MÁLAGA!!!
@GarrinchaCF
Mucha razón @garrinchacf... Por eso hoy es un día grande... ni jeques, ni cavernas mediáticas, ni (con perdón) pollas en vinagre nos lo van a amargar... hoy estaremos en el bombo champions... pese a quien pese...
ResponderEliminarAhora, al ya clásico "Yo también vi marcar un hat-trick a Roteta en la Rosaleda" uniremos, "Yo vi al Málaga en Champions"
:-D
Orgulloso de ser malagueño y malaguista!
En realidad fueron 2 goles... frente al Mérida... Pero recuerdo que todos flipaban en La Rosaleda por la posibilidad del hat-trick y nos fuimos de aquel partido (tras remontada de 1-3) pensando que había metido 3... Recuerdo como todo el estadio gritaba: "Roteta Selección"
ResponderEliminarQ años aquellos!